La agricultura es uno de los sectores donde la prevención de riesgos laborales es más importante. Pero a veces también es la más descuidada y olvidada. En muchos casos hay desconocimiento sobre qué son los EPIS o cómo afrontar la prevención de riesgos en el sector agrícola.
Desarrollar la actividad al aire libre junto a herramientas y maquinaria hace que aumente el riesgo de accidentes en agricultura. De ahí la importancia de los equipos de protección individual (EPI).
También es necesaria la formación adecuada mediante la realización de cursos de prevención de riesgos laborales.
Vamos a ver más en más detalle qué EPIS en agricultura son esenciales para trabajar con seguridad.
Los EPIS en agricultura
Los equipos de protección individual, conocidos como EPI, son elementos y vestimenta diseñados para proteger al trabajador de los peligros laborales.
Los EPIS para agricultura reducen considerablemente dichos riesgos. Unos están pensados para evitar accidentes como torceduras y esguinces. Otros buscan prevenir ciertas enfermedades causadas por la prolongada exposición al sol o el uso de productos químicos, por ejemplo.
La importancia de los EPI en la agricultura
La utilización de los EPIS en agricultura permite un trabajo seguro y eficiente. Durante el trabajo en el campo es muy habitual que haya torceduras por trabajar en firmes irregulares.
Los EPIS para agricultura están pensados para que los trabajadores estén seguros, cómodos y protegidos en todo momento.
Los principales EPI en agricultura
Por lo general los EPIS en agricultura están fabricados con material resistente que protege contra quemaduras, cortes y otros tipos de lesiones.
También hay piezas pensadas para reducir los problemas oculares por polvo o exposición al sol y similares.
Protección de la cabeza
Uno de los epis en agricultura más importantes pero quizás menos utilizado es el casco de seguridad. Debe estar fabricado en un material resistente que proteja de los golpes con ramas, maquinaria o caída de objetos.
Protección ocular y de la cara
Trabajando en el campo la protección de los ojos y la cara es imprescindible. Unas gafas de seguridad o pantallas faciales protegen la vista de las partículas de polvo o los productos químicos.
Estos elementos se fabrican con materiales resistentes que pueden soportar impacto de pequeños objetivos que puedan saltar desde el terreno.
Este tipo de EPI en agricultura permite reducir el riesgo de problemas oculares, heridas en los ojos por pequeñas ramas y similares.
La protección respiratoria
En el campo se utilizan pesticidas y otra serie de productos químicos. Y esto aumenta mucho el riesgo de inhalar sustancias nocivas.
Ciertos epis en agricultura, como mascarillas y respiradores, protegen al trabajador de los problemas respiratorios producidos por insecticidas y otras sustancias tóxicas.
Proteger las manos
Utilizar unos guantes correctos eliminan el riesgo de cortes y quemaduras. También protegen la piel del contacto con sustancias peligrosas.
Los guantes de material de PVC especialmente diseñados para labores agrícolas son esenciales si trabaja con maquinaria o productos químicos.
Los guantes, por ejemplo, evitan el malestar derivado de trabajar con materiales abrasivos. Permiten trabajar con unas manos seguras y protegidas.
La protección del cuerpo
Otro elemento fundamental son los monos de trabajo y trajes de protección. Estos equipos están fabricados con materiales resistentes.
También pueden ayudar en trabajos específicos como la fumigación o la apicultura y ayudan a mantener la temperatura corporal. Esto es importante en épocas de clima extremo reduciendo el riesgo de resfriados o insolaciones, depende de la época del año.
Las protecciones para los pies
Al trabajar en el campo o al aire libre es habitual caminar sobre terrenos irregulares. Utilizar botas de seguridad evita esguinces y lesiones en los pies. Están diseñadas para soportar caídas de objetos de cierto peso en el pie y otros riesgos similares.
Aunque suele ser algo a lo que no se presta importancia en agricultura los EPIS pueden ser una ayuda fundamental. Contribuyen a reducir el riesgo de accidentes como por ejemplo torceduras, esguinces o golpes.
Es necesario incorporar equipos que protejan los pies y eviten esguinces en las manos o problemas oculares.
A la hora de incorporar equipos de máxima seguridad elige equipos adecuados y homologados. Estos evitan problemas relacionados con caídas, torceduras, exposición en exteriores o golpes.