Una de las obligaciones de cualquier empresa es llevar a cabo una prevención de riesgos acorde con los diferentes puestos de trabajo para poder mantener la salud y seguridad de sus trabajadores. Sin embargo, esto no debe centrarse sólo en medidas preventivas y organizativas. La formación de los trabajadores en prevención de riesgos laborales es clave para conseguirlo. Te contamos todo sobre estas actividades formativas en temas de prevención.
Esta formación es obligatoria de acuerdo con la Ley de Prevención de Riesgos Laborales
El artículo 19 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales está dedicado a la formación como pilar de la política preventiva de cualquier empresa. Esta actividad debe llevarse a cabo para asegurar que cada trabajador tiene los conocimientos y herramientas necesarias para protegerse de los riesgos inherentes a su puesto de trabajo.
No solo es obligatorio que la empresa facilite la formación, sino también que el trabajador se instruya correctamente. Por lo que todo lo relacionado con los riesgos laborales de la empresa se convierte en un derecho del trabajador al tener como fin su protección, pero también en una obligación. Esta formación puede impartirse por un miembro cualificado de la plantilla o bien por una empresa de riesgos laborales y debe cubrir tanto aspectos teóricos como prácticos en materia preventiva.
¿En qué consiste esta formación obligatoria?
La formación deberá estar centrada en las necesidades de cada puesto de trabajo, así como adaptarse a los cambios y nuevos riesgos que puedan ir apareciendo. Por lo que no hay un temario fijo a nivel general, sino que se deben tener en cuenta los siguientes aspectos a la hora de identificar las necesidades formativas en cada caso:
- Estudio de las condiciones de trabajo y de sus riesgos derivados.
- Necesidades percibidas por los distintos trabajadores.
- Investigación de accidentes laborales previos.
- Documentación aportada por el Comité de Seguridad y Salud de la empresa.
- Grado de educación de los trabajadores.
Una vez determinadas las necesidades formativas que hay que cubrir es posible elaborar un temario propio a impartir por la empresa, encontrar un curso de prevención de riesgos laborales online adecuado o bien acudir a una empresa de prevención.
¿Cuándo es necesario formar a los trabajadores?
De acuerdo con los servicios de prevención de riesgos laborales esta formación específica debe repetirse periódicamente, así como realizarse siempre en determinadas situaciones:
- En el momento de la contratación de cualquier trabajador.
- Siempre que se produzca algún cambio en las funciones de un trabajador.
- Si se introduce nueva maquinaria o tecnología.
- Al actualizar o realizar algún cambio en los equipos de trabajo.
En cada caso en particular se determinará el nivel de especialización requerido, desde un curso básico prl a una formación más específica.
Por otro lado, esta formación debe hacerse siempre que sea posible dentro del horario laboral. En caso contrario las horas de duración deberán compensarse con un permiso o bien retribuirse como horas extraordinarias.
¿Cuánto tiene que durar la formación en prevención de riesgos?
La ley no estipula una duración determinada de los cursos formativos a nivel general. Aunque sí hay algunas situaciones, como la acreditación de recurso preventivo o la formación para cubrir un puesto de prevención de riesgos laborales dentro de la empresa, que requieren un mínimo de horas. En términos generales podríamos decir que las horas lectivas suelen ser las siguientes según el tipo de curso:
- Cursos básicos, de 20 a 60 horas.
- Cursos de nivel intermedio, 300 horas.
- Cursos de nivel superior, 600 horas.
- Formación para empresarios, 10 horas.
¿Cuánto cuestan los cursos en prevención obligatorios?
Cada formación específica tiene unos costes diferentes para la empresa según dónde y cómo se imparta. Pero hay que señalar que el coste no recaerá en ningún caso en el trabajador, será el empresario el que deba encargarse en todo caso de todos y cada uno de los costes asociados. No solo del curso en particular, también de gastos de desplazamiento, dietas, etc.